Ayer la mamá de Alejandra nos envió un par de fotografías. En una de ellas aparecen Alejandra, Daniela G, Marta e Isabel, viendo una culebra viperina (Natrix maura) muy pequeña. El pequeño reptil se encontraba herido y estaba siendo atacado por hormigas, en mitad de un camino, entre los términos municipales de Ciudad Real y Miguelturra, junto al río Guadiana.
Hoy he ido a verla, con la ayuda de Felipe, padre de Alejandra, que me ha enviado la ubicación. Aunque me ha costado encontrarla, la he visto. Es muy, muy pequeña. Las hormigas la estaban intentando meter en su hormiguero y, aunque ya estaba muerta, parecía viva, con el movimiento que producían las hormigas.
Ayer, al ver las fotografías, pensé que se trataba de un viborezno, es decir, la cría de una víbora hocicuda, aunque la ubicación me parecía muy extraña.
Hoy, al verla y fotografiarla, he visto claramente que se trata de una culebra viperina. Esta pequeña culebra, a pesar del parecido y del nombre, no tiene nada que ver con las temidas y peligrosas víboras. Es inofensiva y suele vivir cerca del agua, dónde caza con verdadera habilidad. Nada y bucea perfectamente. A veces se la puede ver, sumergida en el fondo de un río o arroyo, esperando a que se acerque algún pececillo o anfibio.
Lo más curioso es su gran parecido con las víboras, por eso se llama "viperina". Tiene un diseño dorsal con el típico zig-zag. Pero, además, cuando se asusta, aplasta la cabeza y adquiere una forma triangular, imitando a las víboras.
Como podemos ver, medía unos 16 cms.
La culebra viperina, en la Wikipedia, en inglés, y en francés.
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